Hernán Zin, director del documental ‘13 Días’ disponible en Netflix, narra el rescate del pequeño Julen con una humanidad y honestidad intachables. Unos valores nutridos por su vocación a la hora de narrar historias desde escenarios de guerra y dolor. Descubre las claves que han hecho posible que el retrato del caso Julen sea una obra que retrate la tragedia desde la máxima delicadeza y sensibilidad.
El retrato del rescate de Julen por Hernán Zin, director del documental ‘13 Días’ de Netflix
A mediados de enero de 2019, se produjo el trágico incidente del pequeño Julen; un niño de dos años que de forma accidental se precipitó por un pozo de prospección ilegal en Málaga a más de 70 metros de profundidad. Este suceso despertó el interés de Hernán Zin para hacer de este hecho un documental que reflejara esta historia de resiliencia y superación, priorizando el máximo respeto y sensibilidad hacía los padres.
Como podemos ver en ‘13 Días’, serie documental producida por Secuoya Studios desde su área Unscripted, el director apenas interviene en las entrevistas a los padres del menor, Victoria y José, lo que les permite sincerarse y generar un clima de complicidad. Asimismo, ambos intervienen por separado para contar cómo vivieron los 13 días que duró el rescate, en un espacio de respeto y empatía hacia las víctimas.
Junto a estas íntimas entrevistas, en el documental, el director de ‘13 Días’ también retrata el compromiso de la ciudadanía al involucrarse en una causa ajena que llega al alma. Mineros, bomberos, cuerpos de seguridad e incluso las administraciones públicas se volcaron día y noche para tratar de rescatar al pequeño.
Los elementos clave que utiliza Hernán Zin en cada episodio de ‘13 Días’
La exposición de un relato fiel a la realidad, pero sin herir sensibilidades es un hito conseguido en la creación del documental ‘13 Días’ disponible en Netflix. Gracias a la habilidad de Hernán Zin en la retransmisión de historias como reportero de guerra, Zin ha sabido retratar el dolor, el drama humano, la angustia y la tragedia combinando estos elementos:
El valor del silencio
Basándose en sus competencias musicales, Hernán Zin utiliza los silencios para crear armonía y mostrar la dilación del tiempo. En ese espacio vacío que trata como una pieza de arte, consigue que el espectador empatice con lo que ve y sienta las emociones de las víctimas, lo que posibilita una reflexión sobre lo sucedido. El silencio también se emplea con la intención de contrarrestar la actitud que mostraron los medios de comunicación y las redes sociales con el tratamiento del caso Julen.
Para Hernán Zin, este documental es una forma de hacer justicia ante el tratamiento tan desafortunado que los medios de comunicación llevaron a cabo sobre la tragedia del caso Julen.
La parte humana y la emotividad
En el documental ‘13 Días’, su director consigue emocionar a la audiencia al reflejar la parte más humana. Esta quedó patente a lo largo de los trece días en los que cientos de personas voluntarias colaboraron de forma activa para poder rescatar a Julen a pesar de las malas condiciones del terreno. Por otra parte, la emotividad también se muestra en el coraje de los padres para rehacer sus vidas, con una tercera hija, mostrando su capacidad de superación.
La función del mar en el documental
El mar es una constante en todos los trabajos del director Hernán Zin y lo utiliza por su poder para crear perspectiva. Por su fuerza y su inmensidad, pero también la calma que consigue transmitir cuando se observa en la distancia. En esta docuserie, el mar se presenta como un horizonte de paz que se abre ante nosotros, un mar de esperanza que todo lo llena.
La búsqueda de la justicia, el objetivo de Hernán Zin al crear y dirigir ‘13 Días’
Para Hernán Zin, dar vida a este documental es una forma de hacer justicia ante el tratamiento tan desafortunado que los medios de comunicación llevaron a cabo sobre la tragedia del caso Julen. Y es que el caso fue maltratado a manos de lo que el director llama todólogos por emitir opiniones que, lejos de dar una cobertura empática y respetuosa al suceso, solo buscaron conseguir audiencia por medio del morbo y el sensacionalismo.
En palabras del propio director: “La gente no debería opinar de todo. Los todólogos en la época de Julen se cubrieron de gloria. Decían estupideces. Y eso es algo que el periodismo de espectáculo abusa y tenemos que repensar también como sociedad.” Es por ello también que en ‘13 Días’ se hace una crítica al respecto, que contrasta notablemente con la frescura y la compasión del director al contar la historia.
El director de ‘13 Días’, también busca con esta producción dar un reconocimiento a los héroes y heroínas que participaron en el rescate de Julen, pero también profesorado, personal médico y demás profesiones que quedan a la sombra de otras más visibles como futbolistas o cantantes.
Del reporterismo de guerra a la narración del rescate de Julen en ‘13 Días’
Hernán Zin es periodista y reportero de guerra, escritor y realizador especializado en dar voz a las víctimas de pobreza o conflictos bélicos. A lo largo de su trayectoria, ha pasado por más de 80 países, y en ‘13 Días, docuserie de tres capítulos, combina su talento para mostrar lo mejor de la condición humana con una empatía insuperable a la hora de abordar la mayor de las tragedias, como es la pérdida de un hijo de corta edad.
Otros trabajos de Hernán Zin donde ha quedado patente su capacidad para reflejar historias desde la sensibilidad y la honestidad son ‘Nacido en Gaza’, ‘Nacido en Siria’ o ‘Morir para contar’. Cada una de estas experiencias vividas en pleno campo de batalla le ha servido para retratar el rescate de Julen con autenticidad y humanidad. Como Hernán ha declarado: “Si no sientes, no vayas a una zona de conflicto, no contarías bien la historia”.
Para poder relatar tragedias en toda su esencia, es necesario tener inculcados valores como la humanidad y la compasión, y no cabe duda de que Hernán Zin los lleva dentro y sabe cómo transmitirlos. Así lo demuestra con ‘13 Días’, un claro ejemplo de que es posible retratar una tragedia priorizando el respeto, la empatía y la sensibilidad hacia las víctimas.